El liderazgo más poderoso, el más potente, es el que emana del servicio que prestas y no del de las órdenes que impartes.
El liderazgo más poderoso, el más potente, es el que emana del servicio que prestas y no del de las órdenes que impartes.
El liderazgo más poderoso, el más potente, es el que emana del servicio que prestas y no del de las órdenes que impartes.