Al juego del dinero jugamos todos, quieras o no.
Conocer sus reglas o no, solo lo decides tu y nadie puede impedírtelo.

No me preocupa el dinero, no lo necesito. Me preocupan los que no saben crearlo, cuidarlo ni multiplicarlo.

Si no fabricas tus recursos intelectuales propios, trabajarás en la creación de los ajenos.

No te preocupes tanto por el dinero, ocúpate cada día más, de adquirir conocimientos y experiencias sobre el dinero.

Los pobres tenemos que producir, el único activo que tenemos, INTELIGENCIA, y venderla cara.

Quien quiere busca y encuentra, quien no quiere, justifica y se queja.
A ti nadie te debe, tu le debes al mundo.

Tu pienzas que no vales porque no tienes dinero. Te equivocas. Tu no vales porque no tienes un plan para crear tu dinero.

La energía que necesitas para seguir, cuando otros desisten, está acumulada en tus buenas obras.
Mira atras y eneguetísate.

Para ser certero en tus planes, afíncate en el pasado, apóyate en el presente y ten fé en el futuro.

Una buena planificación tiene en cuenta al pasado, al presente y al futuro.
No existe el futuro, sin pasado ni presente.