Enseñar a pensar a otros, además de divertido, es muy rentable.

Con espiritud aventurero comienzas, alcanza hasta el primer problema, para alcanzar al éxito necesitas al espíritud emprendedor.

Quien no paga por los conocimientos que necesita, pagará, de forma exponencial, por su ignorancia, quiera o no.

La originalidad, no es tan original como parece, en muchos casos, es hacer lo mismo, pero de modo diferente.

Yo cobro caro, porque quiero vender barato.

Los talentos no se venden, se multiplican.

Tu serás alguien, cuando te conviertas en don nadie.

Mi proyecto cambia y cambiará, radicalmente, las relaciones de producción y distribución en el mundo, sobre la base de tus conocimientos y experiencias.

Tus declaraciones son importantes, tus actos imprescindibles para el triunfo.

¿Tus resultados son resultados de tus impulsos o de tus planes?