Quien se precie de ser hombre, tiene el reto de amar a plenitud, liberar a su mujer y no perecer en el intento. Quien ama crece.
Quien se precie de ser hombre, tiene el reto de amar a plenitud, liberar a su mujer y no perecer en el intento.
Quien ama crece.
Quien se precie de ser hombre, tiene el reto de amar a plenitud, liberar a su mujer y no perecer en el intento.
Quien ama crece.
Quien ama crece.